Elegir ajo de calidad es la clave para una experiencia culinaria exitosa. Para elegir el mejor producto, preste atención a los signos externos: las cabezas deben ser densas, sin daños visibles ni moho. El color de la piel puede variar de blanco a morado, lo que indica diferentes variedades de ajo.
El almacenamiento adecuado del ajo también juega un papel importante en la conservación de su sabor y propiedades beneficiosas. Guarde el ajo en un lugar fresco, seco y oscuro. Evite almacenarlo en bolsas de plástico ya que esto puede provocar su pudrición. En su lugar, utilice bolsas o cestas de malla para proporcionar una ventilación adecuada.
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